Construcciones hidráulicas del siglo I d.C. con un total de 20 metros de galerías subterráneas cuya función como sistema de alcantarillado en la época romana, nos indica el grado de urbanización de la ciudad Assido-Caesarina.
Fueron descubiertas en el año 1969.
Se vaciaron entonces sin ninguna metodología arqueológica para ser luego abandonadas. No será hasta 1991 cuando, por iniciativa municipal y de la Consejería de Cultura, se canaliza su investigación y puesta en valor. Se trata de una creación del siglo I d. C.
Tres estructuras diferentes: cloacas, habitaciones romanas y criptopórticos.
Las cloacas máximas se encuentran en la periférica de la ciudad, donde desemboca todo el entramado de cloacas más pequeñas que se extendían por la cuidad. Los muros están hechos de sillares de piedra arenisca y las bóvedas son de medio cañón corrido. El suelo es el original y está impermeabilizado por una capa formada por una mezcla de cerámica triturada de cal. Se aprecia a ambos lados unos acordonamientos que impedirían la filtración de las aguas sucias a través de los muros. En las bóvedas encontramos unos registros circulares que conectaban directamente con las casas.
Construcciones hidráulicas del siglo I d.C. con un total de 20 metros de galerías subterráneas cuya función como sistema de alcantarillado en la época romana, nos indica el grado de urbanización de la ciudad Assido-Caesarina.
ResponderEliminarFueron descubiertas en el año 1969.
Se vaciaron entonces sin ninguna metodología arqueológica para ser luego abandonadas. No será hasta 1991 cuando, por iniciativa municipal y de la Consejería de Cultura, se canaliza su investigación y puesta en valor.
Se trata de una creación del siglo I d. C.
Tres estructuras diferentes: cloacas, habitaciones romanas y criptopórticos.
Las cloacas máximas se encuentran en la periférica de la ciudad, donde desemboca todo el entramado de cloacas más pequeñas que se extendían por la cuidad. Los muros están hechos de sillares de piedra arenisca y las bóvedas son de medio cañón corrido.
El suelo es el original y está impermeabilizado por una capa formada por una mezcla de cerámica triturada de cal. Se aprecia a ambos lados unos acordonamientos que impedirían la filtración de las aguas sucias a través de los muros. En las bóvedas encontramos unos registros circulares que conectaban directamente con las casas.